New Orleans Hornets visitaba el Staples Center con las ganas de dar la sorpresa, de asaltar la catedral angelina para luego dar la puntilla en NO… Lakers, le había dado vida y Chris Paul quería cogerla y quedarsela… pero nadie contaba con Kobe… y mira que decir esto a estas alturas de la película es mucho decir, pero…
Kobe tuvo un pequeño esguince en el 4o partido, incluso se le vio salir en muletas del New Orleans Arena, pero ayer, después de un inicio de partido donde parecía que no estaba bien, todo cambio cuando humilló a Emeka Okafor en uno de los mates más jugones que le he visto hacer a Bryant en mucho tiempo. Este mate fue la alarma, esa lucecita que se enciende en Lakers por está época del año.
Lakers hizo lo que tenía que hacer, dominar el rebote y hacer que la zona interior sea territorio prohibido para Hornets, consiguieron eso, y se llevaron el partido, así de sencillo. Kobe fue simplemente el despertador, el que activó a todo el mundo para decir: señores, ya está bien.
El mate a Okafor fue tremendo, de esos de principios de siglo, cuando Kobe era sin lugar a ninguna duda el mejor jugador de la liga, cuando Kobe estaba sano y sus piernas hacían lo que le daba la gana. Fue muy grande verlo hacer ese mate, como casi igual de grande fue ver el de la 2a parte. Son mates de hambre, de ganas de ganar y creo que esa es la respuesta a la pregunta que todo el mundo se hace cuando Bryant parece lesionado y Kobe siempre responde como mejor lo sabe hacer: en la pista.
La serie vuelve a NO, veremos a ver si Paul vuelve a hacer un partido de los suyos o si por contra el despertador ha hecho que Lakers despierten y cierren el chiringuito…
PD: Artest sigue haciendo una serie tremenda, tanto en ataque como en defensa…