Los juegos de palabras son chulos y están genial para intentar pillar cacho con otros seres humanos pero hoy me siento bastante chamuscado, todavía no ha empezado la pretemporada y ya estoy bastante harto de estos circos.
Todos los años he seguido la pretemporada con mayor o menor interés y siempre he sido consciente, o eso creía, de que son partidos para probar y coger tono físico, para ir entrando en sintonía y para cogerle el hilo un poco a la competición. El momento mas traumático de mi historia en pretemporada fue hace relativamente poco, en Octubre de 2010, cuando los Knicks se pasaron a Paris a dar una vuelta. Ese verano se había firmado a Amare Stoudemire y a un montón de jugadores nuevos, proyecto ilusionante y toda la parafernalia. Una vez sentado en la grada con mi camiseta, mi bufanda y mis calzoncillos de color azul, blanco y naranja preparado para animar a tope me dí cuenta de la broma que era todo esto de la pretemporada. Me llevé un chasco enorme al ver que la rotación fue la que fue siendo Toney Douglas el tercer jugador que más jugó y Anthony Randolph el segundo. Aquel día me llevé un chasco enorme cuando además yo ya sabía lo que iba a suceder perfectamente.
A partir de ahí enterré la pretemporada. Me dije a mi mismo: la diferencia entre la pretemporada y la liga de verano es que en la liga de verano hace buen tiempo para ir a una terracita y en pretemporada con un poco de mala suerte te toca salir con el chubasquero. Eso no significa que no vea los partidos, simplemente significa que no valen ni para sacar conclusiones, o al menos esa idea me quedó clara. El año pasado con el cambio de entrenador y proyecto deportivo estuve más pendiente de la pretemporada. Me vi todos los vídeos que encontraba del training camp, ya fuesen los oficiales o los que subían diferentes blogs, webs o aficionados del equipo y por supuesto me vi varias veces los partidos para intentar analizar como querían poner en práctica el dichoso triángulo ofensivo. Pues bien, perdí de nuevo el tiempo. La pretemporada el año pasado fue como esa revista de deportivos que te pillas un día aburrido en la estación de autobuses y que al cabo de los dos meses acabas usándola de papel para limpiarte el culo en una situación de emergencia sin haber llegado a ojear mas de la página número 10 por no haber llegado a cumplir las expectativas.
Ayer hablando con un amigo mio bastante inteligente pero mucho más optimista que yo me decía lo siguiente: –La diferencia entre el training camp del año pasado y este es que los jugadores parecen jugar de manera mas instintiva, les sale los movimientos de manera mas natural. Insistía en que el año pasado se les veía entrenar de manera mas robótica, es decir, ejecutaban las jugadas porque así lo marcaba el playbook o Fisher sin llegar a leer realmente las jugadas o interpretar el flujo del balón, algo que no sucedía este año.
El año pasado los chicos iniciaban la jugada como mandan los esquemas y los libros del tío Phil, o mejor aún, del tío Tex, todo era muy protocolario, se ejecutaban los cortes en condiciones, se buscaba la pelota al poste alto y todas esas historias que decían que eran las necesarias para ejecutar la geometría baloncestística. Todo muy bonito, muy dibujado sobre un buen papel grueso y rígido. A los 70 días, es decir, poco después de Navidad, no había ni rastro de una escuadra ni un cartabón por ninguna parte. Si, el inicio de la jugada era similar, si no me falla la memoria se iniciaba en el poste algo, pero de ahí en adelante se había eliminado la rigidez robótica y se había pasado a una flexibilidad dada por las características de los jugadores. De ahí que el comentario de mi amigo puede que tuviera sentido. Aunque los chicos empezasen de una manera cartesiana a estudiar el libro de jugadas para ejecutar lo que papá Fish o el yayo Phil querían no eran jugadores preparados para entender lo que se necesitaba y por eso lo que realmente se estaba practicando en Enero era algo en la línea pero mucho mas flexible.
Con esto he llegado a la conclusión nuevamente de que veré la pretemporada muy por encima. El botón de pausa no será un objeto recurrente y muy posiblemente no vuelva a ver ninguno de los partidos repetido, no se pueden sacar conclusiones reales de los mismos. Sí puede ser interesante ver los nuevos jugadores como se desenvuelven en la pista, a ver si es cierto que desprenden esa naturalidad dentro del esquema que no desprendían los anteriores. Aún así habrá tiempo para ir comentando por aquí las sensaciones que van dejando, en especial gente que puede ser una incógnita como Porzingis o Derrick Williams.
Sobre el media day solo voy a comentar una circunstancia, parecía que las respuestas de todos los jugadores estaban elaboradas por el departamento de prensa, algo que no descartaría viendo la relación de Dolan con la prensa de los Knicks dicho sea de paso. Sin novedades al frente, comentarios y respuestas 100% genéricas sin ningún tipo de análisis real posible. Para eso mejor que manden una nota de prensa con una idea general del concepto: vamos a trabajar a tope, mis compañeros son muy majos, no nos ponemos límites ni metas, vamos a ir a por todas. Si coges todas las declaraciones y doblas el audio del media day de, por ejemplo, Denver Nuggets te queda completamente creíble.
Ah, y por cierto, ya empiezan los de la bata blanca a lucir por su ausencia de la mano de una preparación física en condiciones, Porzingis y Afflalo lesionados.
Para el próximo lunes ya tendremos las primeras impresiones de la pretemporada así que no se si hablaré de ello o de como cultivar orquídeas en el jardín que seguramente será mas útil.