Sin duda alguna una de las grandes sorpresas de lo que llevamos en la temporada, es lo que está pasando en Oakland, Golden State Warriors, el equipo de Mark Jackson está dando mucho que hablar, cuando nadie lo esperaba.
La temporada pintaba extraña, tras un debut de Jackson en el banquillo más que frustrante con un 23-43 y donde, ojo, prometió que metería al equipo en PO, poca gente esperaba algo de los Warriors en este segundo año y más después del trade de Ellis a final de temporada después de que la franquicia se cansara un poco de su vida extra deportiva y sus ‘extrañas’ lesiones… pero en ese trade llegaba Bogut, un pivot top de la liga, pero también bajo sospecha o mejor dicho, perteneciente al club del Cristal de Bohemia…
Incluso antes de empezar la temporada, nosotros mismo situábamos a estos Warriors como una de las cosas que teníamos muchas ganas de ver, con Bogut sano, Lee aportando como siempre, Curry ya como jugador franquicia y la ayuda de Thompson en su segundo año, hacía del equipo de Jackson como uno de esos equipos que dices ‘mmmmm….’. Pero Bogut, como no…, se lesionó y empezó con la pesadilla de todo propietario suyo de Fantasy, el Day-To-Day que luego pasa a Out Indefinitely, es decir, está la cosa complicada, pero oye, igual vuelve cuando menos te lo esperes… esto nos saca de quicio.
Pero este equipo tienes las cosas claras y a día de hoy es uno de esos equipos que como ya os dijimos hace semanas, es un equipo que queremos ver. Cómo lo han hecho? muy fácil, olvidándose de Bogut, es decir, no se sabe cuando va a volver, si vuelve… así que lo mejor es no contar con él, para esto Jackson se ha sacado de la manga a Festus Ezeli y sobre todo a Carl Landry, que junto a David Lee juegan a esa nueva moda de no tener a nadie del todo alto, con lo cual hay mucha rotación y sobre todo mucho tiro exterior, cosa que los Warriors con Curry y Thompson van más que servidos. Si a todo esto le sumamos la tremenda aportación de un rookie top como es Harrison Barnes y metemos en el cocktail a un Jarrett Jack motivado, hace un equipo más que suficiente para jugar a esto llamado baloncesto.
Mark Jackson llegó en su día a Warriors con la idea de hacer un equipo defensivo y este año eso se está notando más, es decir, apretando un poco más en defensa y jugando rápido en ataque, hace que estos guerreros, a parte de ganar partidos, mole verlos jugar. Cierto que a veces se entra en momentos de un poco de caos, pero oye, el caos mola y siempre está Curry para hacer alguna de las suyas o Thompson para enchufar varias seguidas.
Mención a parte me merece David Lee, un jugador por el cual siempre he tenido una ligera debilidad y que este año está rozando el 20-10 haciendo una temporada de All-Star, como aquella que hizo en los Knicks, pero con un factor muy importante, ahora lo hace en equipo del oeste y en equipo (de momento) ganador.
Jackson lo prometió en el primer año, pero parece que los PO van a volver a la bahía, habrá que ver cuando vuelve Bogut que pasa, pero de momento si tenéis un rato y no sabéis que hacer, ver un partido de los Warriors os va a cubrir ese rato y encima os lo pasaréis bien. De nada.